LA VIDA FAMILIAR DEL PUEBLO INCAICO

LA

Cuando nacía un niño no se realizaba ninguna ceremonia importante. Solo

Solo cuando cumplía dos años se hacia una ceremonia para ponerle nombre, lo que equivaldría  a nuestro bautizo.

El día señalado para la fiesta, se juntaba toda la parentela del niño y de ella se escogía una persona para que fuera el padrino .el padrino iniciaba la ceremonia cortando el cabello del bautizado, y después de él los seguían los demás concurrentes  por orden de importancia hasta dejar al niño completamente  trasquilado.

Habiéndole cortado el cabello le ponían nombre, y cada uno de los presentes le presentaba un regalo, después de la ceremonia se realizaba la fiesta, con abundante bebida y comida, que podía durar algunos días. Si el bautizado  era un miembro de la nobleza, la ceremonia era mucho más importante.

Los niños eran criados sin mucho engreimiento. No los acostumbraban a que estuvieran  en brazos, ni a mucho comer. Cuando abandonaban la cuna, los colocaban en un hoyo que hacían en el suelo al cual forraban con mantas y en donde el niño jugaba con objetos apropiados que le ponían a su alrededor.

A los niños del pueblo no se les mandaba  a la escuela, estaban reservados para los hijos de los nobles. Dedicándose desde temprana edad  a las labores diarias, el niño ayudando a su padre  y a los mayores en las faenas del campo y la niña en las faenas domesticas ayudando a la madre. Se les cuidaba de su educación física. Les enseñaban a los niños a cazar pájaro  empleando la honda,  adiestrándolos  así para las tareas militares. Se les adiestraba  también en carreras, preparándoseles para ser chasquis.

En el caso de los varones se realizaba la ceremonia del “huarachico” que consistía en imponerles las bragas o huaras y pañetes (calzones)  y por pruebas  en que demostraban su fortaleza y virilidad .si se trataba de un joven de la nobleza, se le horadaba las orejas para que usara los pendientes y la ceremonia era mucho más solemne.

En cuanto a las mujeres, cuando llegaban a la edad señalada, se les hacia la ceremonia del “quicuchicu” que se caracterizaba en consistir en aislamiento de la chica durante algún tiempo, para después ser presentada en público  con un  peinado nuevo, a fin de demostrar su paso de niña a mujer.